Segunda participación en esta carrera que discurre entre los viñedos del Alt Penedés.
El circuito de esta prueba es bastante duro y transcurre la mayoría del trazado por caminos de tierra. Se empieza con una bajada fuerte de 1Km, para después subir durante 2,5Km por algunos tramos de piedra suelta y algunos de asfalto. Hasta el Km6,5 se va bajando encontrando alguna subidita corta y de aquí al final es un sin parar de toboganes para hacer los últimos 300 metros en subida.
Hacía cuatro años que no realizaba la carrera, fue una de las primeras en las que participé y pensaba que no era tan dura, lo asociaba a que en aquella época todavía no había adquirido una forma óptima para afrontar estos desniveles, pero hoy he podido comprobar que es de bastante dificultad.
He llegado a Sant Llorenç con el tiempo suficiente par aparcar al lado del polideportivo donde se entregaban los dorsales y tras recogerlo, he ido a tomar mi café con leche habitual, hoy con magdalena incluida. Aun con tiempo de sobra para empezar, me he cambiado y he ido hacia la zona de salida para conversar con algunos compañeros.
Tras la carrera de ayer en la que me esforcé mas de la cuenta, tenía las piernas bastante cargadas. A falta de 10' para el comienzo he calentado un poco y parecía que no tendría problemas de cansancio acumulado.
A las 10h se ha dado la salida y he salido muy fuerte aprovechando la bajada. Iba muy suelto y no parecía que estuviera haciendo mucho esfuerzo. El primer kilómetro lo he hecho en 3'30". El problema ha venido cuando ha empezado la subida. Las piernas cada vez me dolían mas y poco a poco iba mas lento. Aquí se ha acabado la competición para mi y ha empezado un entreno de fuerza para las piernas. Las subidas las hacía muy lentas - algunas a mas de 6' el mil - y en las bajadas y llanos intentaba apretar lo que podía. Por lo menos hoy no he llegado a meta exhausto y he podido disfrutar de los ánimos de la gente que allí se encontraba, así como de chocar la mano a todos los niños que la ponían.
El tiempo total ha sido de 45'23", quedando el 67 de la general de casi 300 participantes.
La organización hoy nos ha llenado de obsequios. Para empezar, una botella de 1'5 litros de agua que ha ido de maravilla porque a esa hora ya hacía bastante calor. También una manzana y un zumo para recuperarnos del esfuerzo. A parte de estos productos alimentarios, nos han dado otra bolsa que contenía una camiseta - otra para la colección -, una botella de vino, un limpiador multiusos, jabón líquido para las manos, crema solar bronceadora y gel fijador para el pelo - gomina -. Una muy buena bolsa del corredor que hoy en día no es muy habitual encontrarse.
En el apartado de molestias, la habitual de debajo de la rodilla y también la sobrecarga del ísquio izquierdo, muy normal después de realizar dos carreras en menos de 24h. Esta tarde toca baño y masaje para poder empezar la tercera semana de preparación para el maratón en optimas condiciones.
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