El día de descanso de hoy lo he dedicado a disfrutar con la familia en casa aprovechando que la climatología no acompañaba a salir.
Debido a que ayer nos fuimos a dormir tarde ya que celebramos la castanyada con algunos amigos, hoy nos hemos levantado casi a mediodía. Tras la comida, a mi hijo le apetecía echar unas partidas a la Wii y hemos escogido el juego de Mario Kart con el que siempre disfrutamos mucho.
Pau me a dado una paliza de campeonato. Quien me iba a decir a mí, que era un adicto a los videojuegos, que mi hijo me superaría con tanta facilidad, teniendo en cuenta que él tiene limitados los horarios para jugar con las maquinitas.
Después y para rematar la tarde, a ver la TV con un buen bol de palomitas y oyendo como la lluvia golpea contra las ventanas.
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